Cisteller se une a CORPINNAT

La bodega Cisteller, situada en las Montañas de Ordal, en el municipio de Subirats, se ha convertido en la decimotercera bodega en formar parte de la marca colectiva CORPINNAT. Este colectivo, que surgió en 2018, reúne a productores del Penedès comprometidos con la elaboración de vinos espumosos de alta calidad, basándose en estrictos criterios que incluyen el uso exclusivo de uvas ecológicas, vendimias manuales y procesos de vinificación íntegros en la propiedad. La incorporación de Cisteller refuerza el objetivo común de redefinir la identidad de los espumosos de la región.

Cisteller, fundada en 2022 por Jessica Madigan y Sergi Canals, representa una propuesta joven y dinámica en el panorama vitivinícola del Penedès. La bodega se asienta en la finca familiar El Sot y basa su filosofía en el respeto absoluto al terruño, enfocándose en destacar la pureza de los suelos marinos calcáreos de la zona. Con experiencia adquirida en diversas regiones vinícolas internacionales, Madigan y Canals trabajan en todas las fases del proceso, desde la viticultura hasta la elaboración de sus vinos, buscando un equilibrio entre autenticidad y placer sensorial.

La adhesión de Cisteller a CORPINNAT se inició desde los primeros pasos de la bodega, y ahora culmina tras haber superado las auditorías exigidas por la marca colectiva. La incorporación coincide con el lanzamiento de sus dos primeros espumosos: Lucidity, un coupage de Xarel·lo y Macabeu, y Courtship, un blanc de noirs elaborado con Garnatxa negra. Estos serán seguidos próximamente por dos nuevas referencias que consolidarán su propuesta dentro del segmento de alta calidad en vinos espumosos.

CORPINNAT, marca registrada en la Unión Europea desde 2018, establece unos estándares que buscan diferenciar y prestigiar los espumosos elaborados dentro de su delimitación territorial. Este territorio abarca 46 municipios, principalmente en el Alt Penedès, pero también en áreas adyacentes como el Baix Penedès, el Alt Camp, el Anoia y el Baix Llobregat. Las características geográficas, climáticas y culturales de esta región han favorecido históricamente el cultivo de variedades autóctonas como el Xarel·lo, el Macabeu y la Parellada, entre otras.

Con la incorporación de Cisteller, CORPINNAT refuerza su compromiso con una elaboración sostenible y de excelencia. Desde su creación, el colectivo ha integrado a otras doce bodegas, entre ellas Gramona, Recaredo, Llopart y Nadal, todas reconocidas por su dedicación al método tradicional y a la calidad diferenciada. La suma de esfuerzos de estas bodegas consolida una visión compartida que busca proyectar al mundo la singularidad y riqueza de los espumosos del Penedès.