La Asociación de Industrias Vitivinícolas Europeas pide regular el uso del término vinagre

La Asociación de Industrias Vitivinícolas Europeas (Aive) ha enviado al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación sus observaciones sobre el proyecto de real decreto que modifica varias normativas de calidad alimentaria. Aive insiste en que el término vinagre debe reservarse para productos elaborados con vino o alcohol de vino. La asociación denuncia la producción de un producto llamado 'acético 260 de síntesis', que se fabrica con ingredientes industriales y vinagres de alcohol no derivados del vino. Aive propone prohibir la fabricación de vinagre para consumo humano que no tenga origen vínico y pide claridad en el etiquetado para evitar confusiones sobre la procedencia del producto.

Además, Aive sugiere impulsar campañas para reducir el exceso de vinos tintos, promoviendo su uso en la producción de vinagre y evitando el uso de alcoholes no vínicos en su elaboración. En cuanto a las bebidas azucaradas, la asociación recomienda endulzarlas con zumo de uva, considerado el único edulcorante natural, en lugar de azúcares industriales. También subraya la importancia de indicar en el etiquetado el origen de todas las materias primas, incluidos los azúcares.

Respecto a los zumos de uva y mostos con certificación ecológica, Aive señala que deben conservarse en frío. Si se almacenan con altas cantidades de sulfuroso, deberían perder su categoría ecológica, incluso si posteriormente se concentran y liberan de sulfuroso. La asociación recuerda que España debe cumplir con la legislación europea ecológica, ya que los mostos en contacto con sulfuroso dejan de ser ecológicos, y su concentrado tampoco lo sería.

Aive menciona que el aumento del grado alcohólico volumétrico natural es una práctica común en países como Francia, Dinamarca, Países Bajos y Alemania. Si se permite en España, debería realizarse bajo un control estricto, utilizando únicamente mosto concentrado de uva vinificable de Castilla-La Mancha, sin recurrir a rectificados.

Finalmente, Aive señala que la implementación de estas medidas mejorará la salud pública y reducirá la incidencia de enfermedades como la diabetes y la obesidad. La asociación confía en que estas acciones contribuyan a una mayor transparencia y calidad en los productos alimentarios, beneficiando tanto a consumidores como a productores.