Codorníu aplicará un “plus climático” para apoyar a los viticultores

La bodega Codorníu ha anunciado que prevé aumentar la compra de uva al menos en un 50% durante la vendimia de este año. La empresa no descarta incluso superar esa cifra inicial, según ha comunicado a su red de viticultores. Esta decisión se enmarca en una estrategia de arraigo y responsabilidad empresarial que la compañía impulsa desde hace años en el Penedès.

Para esta campaña, se espera una cosecha un 35% mayor que la del año pasado. A pesar de este aumento, Codorníu ha informado a sus proveedores que aplicará de nuevo un “plus climático” del 45% sobre el precio base pactado en los contratos plurianuales. Esta medida busca apoyar a los viticultores ante el impacto persistente del cambio climático, que afecta a los cultivos de la zona y que ya provocó situaciones complicadas en 2023 y 2024 debido a la sequía. El objetivo es ayudar a compensar las pérdidas y dificultades que sufren los agricultores por las condiciones meteorológicas adversas.

El precio medio de la uva para esta campaña se situará en 0,72 euros por kilo. Sergio Fuster, CEO de Raventós Codorníu, ha explicado que la intención es mantener los ingresos por hectárea de los viticultores para asegurar la viabilidad económica de sus explotaciones. La compañía mantiene acuerdos plurianuales con más de 300 familias viticultoras, muchas de las cuales llevan generaciones colaborando con la bodega.

Codorníu puso en marcha este modelo de colaboración en 2019 con el fin de garantizar estabilidad y dignidad al trabajo del viticultor. Desde entonces, la empresa ha promovido mesas de diálogo con organizaciones representativas del sector para construir un entorno más justo y con visión de futuro. Estas reuniones han permitido acordar medidas como el incremento del precio base y el plus climático.

La bodega considera necesario impulsar la revalorización del precio de la uva y pide al resto del sector que también adopte precios justos y acordes a la situación actual. Según Codorníu, esta estrategia es fundamental para dignificar la profesión, asegurar el relevo generacional y mejorar el posicionamiento del cava en los mercados internacionales.

En línea con su propósito corporativo “Dar valor a la tierra”, Codorníu busca construir un modelo vitivinícola que respete tanto a las personas como al paisaje. Desde el año pasado, toda su producción de cava se comercializa bajo certificación ecológica. Además, este año el grupo Raventós Codorníu ha obtenido la certificación B Corp, lo que refuerza su compromiso con la sostenibilidad, la transparencia y el impacto positivo en su entorno.

La empresa subraya que no hay futuro para el cava sin los viticultores y que es necesario seguir apoyando a quienes trabajan la tierra para conservar miles de hectáreas de viñedo y proteger un territorio con valor histórico. Con estas acciones, Codorníu reafirma su apuesta por un sector vitivinícola más justo y sostenible en el Penedès.