Miércoles 20 de Abril de 2022
Habla de las personas.
Son los auténticos protagonistas de la historia, sé parte de ellas y de sus emociones: vidas dedicadas a la calidad, la autenticidad y el trabajo.
Si eres un productor, la historia de tu vino y tu familia van de la mano.
Habla de tu vino como un miembro más de la familia.
Desde su gestación, nacimiento, crecimiento... hasta el momento de máxima madurez y expresión.
Tu producto, tu botella, nunca debe morir, mantén siempre viva esa historia a través de la interacción con tu comunidad, como ya hemos dicho en otras ocasiones.
Habla de tu territorio.
Utiliza elementos descriptivos y visuales para transportar al lector (es decir, el futuro consumidor) al escenario de tu historia.
Habla de la aversidad, los desafíos del trabajo, los obstáculos y el éxito.
El fruto de éste es precisamente el producto en manos del consumidor. Este es el triunfo.
Nunca como antes las personas son las protagonistas que el enoturista busca en su visita a tu bodega.
Entrar en una relación lo más directa y personal posible para garantizarte un consumidor de por vida. Ahora es el momento apropiado!