Vino con ozono y otros inventos: los nuevos vinos

Escrito porAlberto

Lunes 09 de Marzo de 2020

¿Vinos con ozono? Lo cierto es que siempre se ha tenido a la industria del vino como muy tradicional, apegada a la tierra y con procesos antiguos que no evolucionan durante siglos, pero toda esta leyenda no tiene nada que ver con la realidad de la industria vitivinícola. Lo cierto es que en los últimos 30 años, especialmente en España, ha habido una revolución tecnológica, y los resultados son nuevas formas de elaboración que están dando lugar a vinos diferentes, únicos, algunos de los cuales se sitúan entre los más caros, exclusivos y mejores del mundo. Hoy os vamos a contar la historia de algunos de ellos:

  • Los vinos con ozono

El ozono es un gas que está presente de forma natural en el medio ambiente. Tiene un efecto desinfectante, sin dejar residuos químicos que haya que enjuagar con agua, por lo que es más limpio, no necesita tanto consumo de agua, y no deja residuos contaminantes. Todo ventajas.

Pero el uso del ozono se ha llevado aún más lejos: hay bodegas que lo están mezclando con el agua de riego para que las vides estén libres de mohos y bacterias, con lo que se ahorran en desinfectantes, fungicidas y demás químicos, además de conseguir, según explican, vinos más resistentes, que incluso pueden permanecer años abiertos sin avinagrarse.

Uno de los viñedos regados con agua hiperionizada, Aurum Red, presume de ser el más caro del mundo. Se produce en Las Pedroñeras -Cuenca-, y la botella ronda los 17.000 euros. Olvídate de Vega Sicilia, este vino apenas conocido en España es ahora el preferido de los jeques y los más poderosos.

Ahora el vino ozono es tan sólo una curiosidad, pero el uso del ozono en la desinfección de bodegas se va extendiendo, abaratando costes y ayudando a una elaboración más natural.

  • Vino con oro

El vino con oro es un paso adelante en la idea de disfrutar del vino como parte de una experiencia gastronómica total. El polvo de oro comestible lleva años en la cocina, especialmente en la repostería, aunque su uso es meramente ornamental: más allá de los visual, su impacto en el aroma es casi nulo, y no afecta al sabor. Sin embargo, especialmente en los espumosos, donde se mueve al ritmo de las burbujas, el efecto visual es extraordinario, y hace que el cava o el champagne sea más apetecible.

Describir por tanto el espumoso con oro como un avance sea decir demasiado, pero lo cierto es que este tipo de productos hace que la industria del vino cobre un nuevo atractivo para los clientes que han cambiado sus preferencias por otras bebidas más "de moda". Y si esto sirve para que vuelvan sus miradas hacia el vino, ¿qué hay de malo?

  • Vino con purpurina

Una vuelta de tuerca al vino con oro es el llamado "vino con purpurina". ¿En qué consiste? Pues bien, una vez que el vino con oro se popularizó, y se comprobó que los amantes de las bebidas aceptaban esta novedad, el siguiente paso era probar con otros colores y efectos. Y llegó este vino con purpurina.

Si habéis visto alguna botella de este tipo de vino, como el Aviva Pink, enseguida os llamará la atención el efecto que se produce en la botella al agitarla. En realidad lo que se usa no es purpurina como tal, sino un colorante, que al agitar la botella parece que la enturbia, dando un efecto de densidad que no es tal, y coloreando todo el vino con una tonalidad determinada. Funciona especialmente bien con los vinos blancos, especialmente aquellos que tienen carbónico, como sucede con el vino con oro, y los tonos puedes ser azules, dorados, rosáceos e incluso verdosos. Todo una delicia para la vista. ¿El resultado en boca? Prácticamente indistinguible de un vino sin esas alharacas. Pero, como ya hemos comentado antes, si queremos que el público se lance a comprar vino, no sólo debemos pensar en notas de cata con lenguajes anticuados, especialmente para aquellos nuevos consumidores. El vino debe resultar atractivo, para una vez probado pasar a ser cautivador.

  • Vino de manzana

Aunque esta última "novedad" no sea tal -el apfelwein o vino de manzana se elabora desde el siglo XVI en Alemania-, su resurgimiento y la apuesta que están haciendo por introducirlo algunas bodegas en España despierta un nuevo interés. Este vino, o producto más parecido al vino que a la sidra, por su elaboración, permite unir el conocimiento del proceso por parte de los viticultores con la amplitud de aroma de las manzanas.

Pronto, quizá, tengamos nuevas gamas que añadir a los lineales, basados en la verde doncella, la reineta o la Pink Lady, y descubriremos los matices de cada una al contacto con la barrica. Se abre un nuevo mundo de aromas, sabores y experiencias que disfrutar. ¿Te apetece?

Un artículo de Alberto

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