Qué es el vino de honor y en qué consiste

El vino de honor forma parte de una costumbre fuertemente arraigada en nuestra cultura. Si eres un amante de los...

Vilma Delgado

Viernes 21 de Julio de 2023

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El vino de honor forma parte de una costumbre fuertemente arraigada en nuestra cultura. Si eres un amante de los buenos vinos y quieres saberlo todo acerca de ella, nuestro post es lo que necesitas para saciar tu curiosidad. ¿Vamos a ello?

Además de ser una bebida deliciosa, el vino está presente en los momentos más importantes de nuestras vidas. ¡No podemos imaginarnos una celebración sin él! Es por ello que la tradición que hoy nos ocupa nunca pasa de moda.

Qué es el vino de honor

El vino de honor es un evento de corta duración en el que se sirven vinos y aperitivos. Dicho encuentro suele ser el colofón de un acto o reunión de carácter social, cultural o profesional.

La expresión “vino de honor” se utiliza con más frecuencia en países iberoamericanos (como Argentina, Chile o México). En España, por su parte, también se la conoce como vino español o cóctel. No obstante, los cócteles no son exactamente lo mismo, como luego veremos. 

La gran virtud de estos actos es que resultan tan elegantes como relajados. Es más, en ellos los asistentes lo tienen muy fácil para socializar de forma cómoda y distendida, ya que pueden moverse libremente por la sala.

El vino español está adquiriendo mucha fuerza en el mundo empresarial debido al creciente espíritu colaborativo de este. La verdad es que estos eventos son muy útiles a la hora de cohesionar al grupo y fomentar el trabajo en equipo.

Cuáles son sus características y qué se sirve

Versatilidad en estado puro 

Esta clase de eventos son tremendamente polifacéticos, apropiados para cualquier ocasión. Así, es muy frecuente que actos tan distintos como bodas, conferencias, entregas de premios o presentaciones de libros los incluyan en su planning.

Lo bueno, si breve…

Algo muy distintivo del vino español es lo poco que dura. Ciertamente, en estas cuestiones no hay nada escrito en piedra, pero lo habitual es que su duración no exceda de 90 minutos.

Que el vino de honor sea un evento relativamente fugaz es lógico si tenemos en cuenta que los invitados estarán de pie mientras se celebra. Es por ello que, en aras de su comodidad, su duración habitual suele oscilar entre 30 y 45 minutos.

Cualquier lugar es bueno para celebrar un vino español 

A diferencia de lo que sucede con otros eventos, los vinos de honor son compatibles con gran variedad de espacios, tanto interiores como exteriores. Esto se debe a su carácter distendido y al hecho de que acompañan a un heterogéneo abanico de actos sociales.

Al ser actos bastante relajados, los vinos de honor suelen celebrarse en el mismo lugar donde ha tenido lugar el acto que festejan. Por ejemplo, en la librería donde se ha presentado un libro o en la empresa donde se ha homenajeado a un empleado.

El vino: el rey del evento

Como su propio nombre indica, los vinos ocupan un lugar central cuando celebramos un vino de honor. Lo más usual son los tintos de crianza (como Rioja o Ribera) y los blancos (como Rueda). Por su parte, el champán, la cerveza, el vermú y los vinos generosos (por ejemplo, el Jerez) también resultan apropiados si así lo aconseja el maridaje de los aperitivos.

Lo habitual en estos actos es que se sirvan diversas variedades de vino para que los asistentes puedan maridarlas con los tentempiés. Recordemos que, a diferencia del cóctel, la bebida tiene mayor protagonismo que la comida. De hecho, para su organización se suele contactar directamente con las bodegas. 

Sin poner en duda que los vinos son consustanciales a estos eventos, siempre es recomendable servir, junto con ellos, bebidas no espirituosas, como zumos, refrescos y agua mineral. De este modo, podremos integrar con éxito a los asistentes que no pueden beber alcohol (por salud, religión, convicción personal, etc.).

Limitado a los alimentos que puedan tomarse con la mano 

El vino español es incompatible con los cubiertos. Quienes asisten a estos actos sostienen su copa con una mano y dejan libre la otra para coger los entremeses o saludar a los otros invitados. 

Si un alimento requiere el uso de nuestras dos manos para poder consumirlo, queda descartado de este tipo de celebraciones. Es por ello que en ellas se sirven canapés, snacks, bocadillos y “pinchitos” (finger food).

Algunos ejemplos de aperitivos que pueden acompañar a los vinos de honor son:

  • Tablas de quesos
  • Tostas con foie
  • Rabas de calamar
  • Croquetas
  • Frutos secos
  • Rueda de ibéricos
  • Gambas rebozadas
  • Brochetas (de fruta, carne, marisco, etc.).
  • Pastelitos dulces o salados
  • Sándwiches

En definitiva, toda celebración que aspire a ser memorable tiene en el vino de honor su mejor aliado. Sofisticado y placentero a partes iguales, resulta idóneo cuando queremos que nuestras reuniones marquen la diferencia. ¡Inclúyelo en tu próximo evento y conviértete en el perfecto anfitrión!

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