El vino español conquista Latinoamérica y el Caribe

Las exportaciones españolas de vino a Latinoamérica y el Caribe en el primer trimestre de 2024 muestran una notable recuperación respecto al año anterior, según el último informe del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV). Este crecimiento se refleja tanto en el volumen como en el valor de las ventas, con un incremento del 10,4% en volumen y del 14,8% en valor, alcanzando los 14,7 millones de litros y los 47,3 millones de euros, respectivamente. Además, el precio medio por litro subió un 4%, situándose en 3,23 euros.

México se mantiene como el principal destino de las exportaciones españolas de vino en la región, consolidando su posición con un crecimiento significativo. La República Dominicana, Brasil y Cuba también destacan como mercados importantes, mostrando una tendencia al alza en la demanda de vinos españoles.

En cuanto a los tipos de vino exportados, el vino tranquilo envasado predomina claramente, representando el 69% del volumen y el 79% del valor total de las exportaciones. Dentro de esta categoría, los vinos con Denominación de Origen Protegida (DOP) son los más comercializados, reflejando la preferencia de los consumidores latinoamericanos y caribeños por productos de calidad reconocida.

El informe del OEMV destaca la importancia de estos mercados emergentes para la industria vinícola española, que busca diversificar sus destinos de exportación y reducir la dependencia de los mercados tradicionales europeos. Esta estrategia de expansión se ve respaldada por el aumento de la demanda en Latinoamérica y el Caribe, regiones que están desarrollando un mayor interés por los vinos de calidad procedentes de España.

La recuperación del sector en estas áreas se debe en parte a las estrategias de promoción y comercialización adoptadas por las bodegas españolas, que han reforzado su presencia y visibilidad en estos mercados. Además, la firma de acuerdos comerciales y la reducción de barreras arancelarias han facilitado el acceso de los vinos españoles a estos países, contribuyendo al aumento de las exportaciones.

Las perspectivas para el resto del año 2024 son optimistas, con expectativas de que esta tendencia alcista se mantenga y se consolide, gracias a la creciente apreciación de los vinos españoles en Latinoamérica y el Caribe. Las bodegas españolas continúan trabajando en adaptarse a las preferencias locales y en ofrecer productos que satisfagan las expectativas de calidad y diversidad de los consumidores de la región.

La importancia de estos mercados se refleja no solo en los números, sino también en las acciones concretas de las bodegas y organismos españoles, que ven en Latinoamérica y el Caribe una oportunidad clave para el crecimiento y la expansión internacional del vino español.