La sequía golpea duro a la producción vitivinícola española con una caída del 21%

La campaña vitivinícola 2023/2024, que comenzó el 1 de agosto, está marcada por una notable reducción en la producción debido a un prolongado periodo de sequía. Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, se prevé cerrar con una producción de 32 millones de hectolitros de vino y mosto, lo que representa un 21% menos que la campaña anterior y un 25% inferior al promedio de las últimas cinco campañas.

En la reciente reunión de la Mesa Sectorial del Vino, la directora general de Producciones y Mercados Agrarios, Ana Rodríguez, analizó la evolución de la campaña junto con representantes del sector. La campaña concluirá a finales de julio, pero aún es prematuro hacer previsiones sobre la nueva cosecha debido a la falta de datos oficiales y estimaciones concretas.

Durante el encuentro, se discutieron las existencias de vino a finales de abril, que alcanzaron los 37 millones de hectolitros en las principales zonas productoras. Sin embargo, se destacó la disparidad en la recogida de datos entre comunidades autónomas, lo que complica el análisis global y afecta la planificación sectorial.

En cuanto a los precios, desde el inicio de la campaña 2023/2024, el vino blanco ha mantenido precios superiores al tinto. A pesar de que ambos han visto un aumento en comparación con la campaña anterior, los precios están por debajo de lo esperado, principalmente debido a la caída del consumo.

Las exportaciones, por su parte, alcanzaron los 20 millones de hectolitros entre abril de 2023 y marzo de 2024, registrando una disminución del 3,6% respecto al año anterior y un 2,6% menos que el promedio de los últimos cinco años.

La solicitud de autorizaciones para nuevas plantaciones de viñedo en 2024 asciende a 1.900 hectáreas, mientras que la superficie disponible total para estas solicitudes es de 928 hectáreas en toda España. Esta diferencia refleja las limitaciones en la expansión del viñedo nacional.

Rodríguez también informó sobre las actualizaciones normativas que afectan al sector vitivinícola, incluidas las mejoras en la normativa nacional sobre el potencial de producción vitícola. Además, recordó que el ministro Luis Planas propuso en el último Consejo de Ministros de la UE la introducción de flexibilidades en la normativa de autorizaciones de plantaciones de viñedo para mitigar los efectos de la sequía.

En la reunión, se abordó la situación de la Intervención Sectorial Vitivinícola (ISV) y se discutieron las medidas previas a la vendimia, como la cosecha en verde y la destilación de crisis. Estas medidas buscan equilibrar la oferta y la demanda y aliviar la tensión en regiones con altos niveles de existencias.

Finalmente, Rodríguez se refirió a la próxima modificación del Plan Estratégico de la PAC (PEPAC) y explicó el reparto de la ficha financiera de la ISV, así como los mecanismos para maximizar la ejecución de los fondos disponibles. Estos esfuerzos pretenden proporcionar un alivio significativo al sector vitivinícola en un momento crítico, marcado por la escasez de recursos hídricos y las dificultades económicas.